lunes, 18 de mayo de 2009

NEGRA SEMANA NEGRA

Esta semana estamos todos de luto, esta entrada no tiene nada que ver con la mecanica habitual de este blog, pero como persona sensible que soy y no pudiendome abstraer de la realidad de las cosas, me hago heco de dos desapariciones irremplazables del mundo de las artes y del mundo en general. Esta negra semana, nos hemos quedado huerfanos de Antonio Vega y de Mario Benedetti, dos puntales de la creacion artística, esta semana negra hemos muerto todos un poco.

Decia la canción, "Cuando muere el cantor muere lavida", nunca tubo mas razón que en este caso, la  perdida de estos dos seres maravillosos, solo nos sume en una zozobra que nada ni nadie podran mitigar estamos huerfanos, si, huerfanos en nuestra ansia por labusqueda de la belleza y ya nada lo remediará, hemos quedado desamparados en este muundo de oropel ficticio y de balores desteñidos, ahora tendremos que valernos por nosotros mismos en esa procelosa singladura que es la busqueda de la belleza, porque Antonio y Mario nos han dejado para no volver.

¿Para no volver?, tal vez no por que dejaron tras de sí un legado que perdurará a pesar de modas y modismos, a pesar de los pesares y aun que le pese a quien le pese no se han ido del todo aun podemos escucharlos y leerlos, aun podemos emocionarnos y llorar de alborozo con esas pequeñas y grandes maravillas que crearon para nosotros y la posteridad.

Es el tiunfo del hombre y su ingenio es la sublimación de la evolución de la cultura, es el crisol donde se forjan los sueños.

Gracias Antonio, gracias Mario por que vosotros mas que nadie supisteis criarnos en la humanidad.

DEDICO ESTA ENTRADA CON CARIÑO A ELENA CLASICA QUE SÉ QUE LOS AMA A LOS DOS.

4 comentarios:

  1. Sí, Spok tienes razón: todos nos hemos muerto un poco. ¡Qué terrible desolación! ¡Qué terrible soledad! Negro dolor, una semana que nos arrasa el corazón a todos los que amamos el arte de estos dos grandes.
    ¡Descansen en paz, pues!

    Sus creaciones seguirán anidando en nosotros.
    Sí, Spok, los amo a ambos, de todo corazón muchas gracias por la dedicatoria, eres un encanto. Gracias.

    Si me permites, me gustaría añadir un poema del gigante Benedetti:

    Los sueños son pequeñas muertes
    tramoyas anticipos simulacros de muerte
    el despertar en cambio nos parece
    una resurrección y por las dudas
    olvidamos cuanto antes lo soñado
    a pesar de sus fuegos sus cavernas
    sus orgasmos sus glorias sus espantos
    los sueños son pequeñas muertes
    por eso cuando llega el despertar
    y de inmediato el sueño se hace olvido
    tal vez quiera decir que lo que ansiamos
    es olvidar la muerte
    apenas eso.

    Seguid alumbrando nuestro camino, hasta siempre Antonio Vega y Mario Benedetti.

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  2. Precioso homenaje rindes hoy a Vega y a Mario.

    Un escalofrío me ha recorrido la sangre desde que vi tu post esta mañana, y aún continúa..

    Te felicito, grandiosa y sentida entrada que compartes hoy!

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  3. Querido Spok:

    he aquí un hermoso y crespuscular poema de nuestro amado Benedetti. Creo que te va a gustar y a los lectores de tu espacio. Que siga ardiendo esta vela mágica. Un abrazo.


    Historia de vampiros
    Era un vampiro que sorbía agua
    por las noches y por las madrugadas
    al mediodía y en la cena.

    Era abstemio de sangre
    y por eso el bochorno
    de los otros vampiros
    y de las vampiresas.

    Contra viento y marea se propuso
    fundar una bandada
    de vampiros anónimos,
    hizo campaña bajo la menguante,
    bajo la llena y la creciente
    sus modestas pancartas proclamaban,
    vampiros beban agua
    la sangre trae cáncer.

    Es claro los quirópteros
    reunidos en su ágora de sombras
    opinaron que eso era inaudito,
    aquel loco aquel alucinado
    podía convencer a los vampiros flojos,
    esos que liban boldo tras la sangre.

    De modo que una noche
    con nubes de tormenta,
    cinco vampiros fuertes
    sedientos de hematíes, plaquetas, leucocitos,
    rodearon al chiflado, al insurrecto,
    y acabaron con él y su imprudencia.

    Cuando por fin la luna
    pudo asomarse
    vio allá abajo
    el pobre cuerpo del vampiro anónimo,
    con cinco heridas que manaban,
    formando un gran charco de agua,
    lo que no pudo ver la luna
    fue que los cinco ejecutores
    se refugiaban en un árbol
    y a su pesar reconocían
    que aquello no sabía mal.

    Desde esa noche que fue histórica
    ni los vampiros, ni las vampiresas,
    chupan más sangre,
    resolvieron
    por unanimidad pasarse al agua.

    Como suele ocurrir en estos casos
    el singular vampiro anónimo
    es venerado como un mártir.

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  4. Homenaje querido Spok espectacular, directamente a la vena madre, se me clavó, excelente.

    De lo mejor de la red

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